martes, 18 de septiembre de 2012

Por las tierras de Guara

Y tras muchos meses, Vadiello.

Excelente fin de semana el que hemos disfrutado en compañía de carruseles de buitres leonados, jabalíes merodeadores, ardillas saltimbanquis y una escurridiza escolopendra.


La zona

Embalse cercano a Huesca, en los dominios de Guara, que surte de agua de boca a la capital del Norte de Aragón. Pinos que aparentan menos edad de la que verdaderamente tienen, mallos de aspecto telúrico que invitan a ser escalados y montañas que parecen plegadas en vertical por las manos de un coloso. Todo reflejado en las aguas mansas, tristemente bajas, del pantano que recibe su nombre.





Actividades

Escalada deportiva, barranquismo y, por supuesto, senderismo. Podéis disfrutar de rutas como la S-7 o tramos del Camino Natural de la Hoya de Huesca.


La casa

Enclavada en un altozano y oculta por un denso vallado de bosques y roca, nos alojamos en la que fue antigua morada del ingeniero de obra del pantano. Una edificación sencilla, con un entrañable toque bauhaus a la aragonesa.


Un tipo rapado que pasaba por ahí.


El papeo

Para comer, un clásico entre clásicos aragoneses, asado de ternasco (jarretes, en este caso) con patatas. No voy a entrar en detalles porque desde hace años uso la fantástica receta de Bertus y en su página está perfectamente explicada. Mi único añadido en el proceso es pincelar la capa exterior del ternasco con un poco de agua y sal marina 5 minutos antes de sacar el asado, y aumentar la temperatura del horno ese tiempo, lo que hace más crujiente la capa exterior del jarrete.

Eso sí, abstenerse de liarse con el vino antes de cocinar o los ingredientes acabarán hibernando para los restos en la nevera...


¿Dónde co*on*s está la cebolla de Fuentes?


...Y algún mardito roedóh te enviará ésto:

Juas juas!!!


Al día siguiente, "musaña" de morcilla. Una mezcla heavy de lasaña + toques de musaka y verduras; capas exteriores (superior e inferior) de pasta con el objeto de darle un poquito de consistencia al asunto y "divisiones" interiores a base de berenjena. Los ingredientes los tenéis en la foto que sigue, más aceite de oliva, sal, tomate natural triturado, queso para gratinar, albahaca y, por supuesto, placas de lasaña (pinchad para ampliar):




Prepararla es simple. Se unta en aceite -o mantequilla- la bandeja y se coloca una primera capa de placas de pasta (recomiendo usar las que no necesitan hervirse, porque el ahorro de tiempo es considerable). Sobre esta primera capa, colocamos un mix de pimiento rojo, pimiento verde, puerro, calabacín y cebolla. Todo bien picado y preparado previamente en sartén con un poco de aceite de oliva, sal y albahaca. Añadimos tomate natural triturado -sin pasarse, sólo para dar un toque- y cubrimos con besamel. Seguimos con una capa de berenjenas fritas, cortadas en finas láminas. Continuamos con las setas y champis sofritos con ajo muy fino, besamel, otra capa de berenjenas y desmigamos por encima la morcilla de arroz. A continuación más besamel, una última capa de placas y de nuevo besamel que lo cubra todo. Horneamos una media hora a media temperatura, gratinamos con queso, dejamos reposar unos minutos y a comer.




La "becha", en las capas interiores, que cubra pero no bañe, u obtendréis una piscina de besamel con verduras. Las cantidades, de perogrullo: las que os gusten de cada ingrediente. Ojo al horno por que cada uno tiene sus tics; para comprobar si está en su punto, nada mejor que el infalible método de pinchar con el tenedor. Finalmente, y a título personal, no salo la berenjena ni uso orégano; como siempre, hacerlo o no depende del gusto personal de cada uno.

Nos vemos.